Hoy quiero hablar un poquito sobre armonías y contrastes.
Primero les comparto nuevamente esta imagen, para que
visualicen lo que vamos diciendo:
Definimos armonía como la combinación de colores que son
“amables”entre sí, ya sea por cercanía en el círculo cromático, o bien, por un
contraste favorable.
Las armonías se logran de diferentes maneras:
Podemos utilizar únicamente los tonos intermedios entre un
color primario y su análogo (su vecino en el círculo cromático).
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-Bueno, acá se usaron los intermedios y los dos primarios, pero me pintó el romanticismo-
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O podemos tomar un color (o dos vecinos) e ir agregando
pequeñas cantidades de blanco para lograr distintos tonos y modificar su
intensidad.
Esto es algo parecido a las cartas de color que encontramos
en las pinturerías (y que yo me guardaba cuando era chica porque me gustaba el
degradé que tenían)
También tenemos la posibilidad de realizar “armonías”
jugando con los contrastes. Y cómo formamos un contraste? Muy sencillo: con
colores complementarios.
Esas combinaciones son maravillosamente contrastantes y su efecto visual es de
una vibración extrema.
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| Este es un trabajo mio |
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| Si la cámara me acompaña, les hago zoom... |
Esto también aplica a los diferentes tonos de los opuestos
complementarios, aunque la vibración visual que causen va a depender de la
intensidad de la pareja de colores.
Sin embargo el mayor de los contrastes se genera en entre
blanco y negro.
Vean sino esta imagen:
En el lenguaje plástico, nos referimos al blanco como la luz
y al negro como la ausencia de ella.
Hasta aquí logramos armonías y sabemos como lograr
contrastes con colores opuestos. Pero que pasa si en lugar de combinarlos, los mezclamos? Surgen los colores neutros.
Mezclando el blanco y el negro, obtenemos grises.
Si mezclamos los colores complementarios obtenemos los
famosos colores tierra que conocemos
como marrones.
Los colores neutros tienen la característica de no competir
con ninguno de los que tenga al lado, siempre pasan a segundo plano y le deja
el protagonismo al más puro o intenso. Digamos que ellos saben como
tratar a divas y celebrities del círculo cromático.
Para ir cerrando el tema, tal como hicimos en los posteos anteriores, un comentario acerca del efecto en nuestras emociones: los tonos neutros las aplacan de manera natural y es
interesante utilizarlos en momentos de mucha ansiedad (eso sí, ni se les ocurra usarlos en momentos de tristeza o en casos de depresión).
Eso es todo por hoy. No hay jueguito esta vez, pero terminamos con la canción que me sonaba en la cabeza mientras escribía este post:
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